* Obama habla de "nueva fase" en campaña contra Estado Islámico
* Defiende su plan de usar poderes ejecutivos para implementar reformas migratorias
WASHINGTON, 9 nov, 9 Nov. (Reuters/EP) -
- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que su decisión de doblar el número de asesores militares estadounidenses en Irak marca una nueva fase en la campaña contra Estado Islámico y que no es un indicio de que su estrategia en la región haya fallado.
En una entrevista con el programa "Face de Nation" de la cadena CBS emitida el domingo, Obama dijo que la primera fase era lograr un Gobierno iraquí que fuera inclusivo y creíble.
Afirmó que el envío de 1.500 tropas estadounidenses adicionales también significa un cambio desde una estrategia defensiva a una ofensiva. La decisión fue anunciada el viernes.
"Los ataques aéreos han sido muy efectivos para degradar las capacidades de ISIL y frenar el avance que estaban haciendo", declaró Obama, según una transcripción de CBS.
"Ahora lo que necesitamos son tropas terrestres, tropas terrestres iraquíes, que puedan comenzar a expulsarlos", agregó.
El mandatario estadounidense no descartó el envío de más tropas a la región. "Sabes, como comandante en jefe nunca voy a decir nunca", comentó a CBS.
No obstante, Obama dijo que sus comandantes militares creen que se necesitará de menos tropas cuando pase el tiempo y en la medida en que miembros de la coalición se unan a Estados Unidos para entrenar y ayudar a tropas iraquíes.
Ataques aéreos de Estados Unidos destruyeron el sábado una caravana de Estado Islámico cerca de la ciudad iraquí de Mosul, pero funcionarios estadounidense dijeron que no estaba claro si el principal comandante del grupo, Abu Bakr al-Baghdadi, se encontraba a bordo de alguno de los 10 vehículos alcanzados.
La decisión de enviar más soldados tuvo lugar cinco meses después de que Estado Islámico capturó buena parte del norte de Irak. El grupo militante también ha tomado el control de territorios en Siria, donde Estados Unidos lidera ataques aéreos contra combatientes islamistas.
El retiro de tropas de combate desde Irak por parte de Obama en el 2012 ha sido fuertemente criticado por algunos republicanos, incluyendo al senador John McCain, pues afirman que dejó al país sumido en los enfrentamientos y el caos.
Legisladores demócratas y republicanos dijeron en programas dominicales de televisión que creen que el Congreso debería tener algún poder de decisión en lo que respecta a tropas, como la anunciada por Obama la semana pasada.
INMIGRACIÓN
En el mismo programa, Obama defendió su plan de usar poderes ejecutivos para implementar algunas reformas en inmigración y dijo que había esperado suficiente para que el Congreso actúe.
El viernes, el mandatario dijo a líderes del Congreso que intentaría aliviar algunas restricciones a los inmigrantes indocumentados, pese a las advertencias de líderes republicanos de que esas acciones "envenenarían el pozo" o serían una "bandera roja delante de un toro".
La reunión se produjo luego de que el Partido Demócrata de Obama fue castigado en las elecciones de mitad de periodo el martes.
Los republicanos tomaron el control del Senado de Estados Unidos y mantuvieron una mayoría en la Cámara de Representantes, lo que según Obama era un mensaje de los votantes que lo consideran responsable por la forma en que trabaja Washington.
En la entrevista con "Face the Nation", Obama comentó que había observado mientras el Senado de Estados Unidos presentaba un proyecto de reforma de inmigración bipartidista, que finalmente no fue considerado por el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner.
Obama dijo a Boehner que si el proyecto no era aprobado para fin de año, la Casa Blanca tendría que tomar medidas para mejorar el sistema.
"Todos coinciden en que el sistema de inmigración está descompuesto. Y hemos estado hablando de eso durante años en términos de repararlo", dijo Obama, según una transcripción de la entrevista.
"No tenemos la capacidad de deportar a 11 millones de personas, todos están de acuerdo con eso", afirmó.