Plataforma de PEMEX
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MÉXICO DF, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

   El Senado de México ha aprobado este miércoles, en lo general y en lo particular, la reforma energética, que ha generado un intenso debate porque abre la puerta a la entrada de capital privado en la explotación de los hidrocarburos del país iberoamericano.

   Tras 20 horas, los senadores han aprobado el proyecto de ley con 81 votos a favor, los del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y Los Verdes (PVEM), y 20 en contra, los del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido del Trabajo (PT).

   "Ya pueden irse tranquilos a descansar porque estamos terminando un trabajo legislativo. Es verdad, me siento orgulloso", ha dicho el presidente del Senado, Raúl Cervantes, al anunciar el resultado de la votación, según informa el diario mexicano 'Milenio'.

   La reforma energética ya había quedado aprobada en lo general a última hora del martes, con 95 votos a favor y 28 en contra, con el apoyo y la oposición de los mismos partidos políticos que finalmente han dado el visto bueno al proyecto de ley.

   La discusión en la cámara alta se ha alargado tanto porque los senadores han tenido que discutir las 313 enmiendas que han presentado los partidos opositores, sobre todo PRD y PT, referidas tanto a la motivación general del texto como al articulado en particular.

   El enfrentamiento se ha centrado en la modificación de los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución y en ocho artículos transitorios del borrador, especialmente en el cuarto, núcleo de la reforma energética porque establece las formas de contratación.

   Muestra de la profunda división que ha generado este proyecto de ley en la cámara alta es que, tras su aprobación, los senadores de PRD y PT han gritado "¡Consulta popular!, ¡Consulta popular!", a lo que los de PRI, PAN y Los Verdes han contestado "¡México!, ¡México!".

IDAS Y VENIDAS

   El pasado sábado, los principales partidos políticos mexicanos finalmente consiguieron llegar a un acuerdo para redactar el borrador de la reforma energética, después de una semana de intensas negociaciones entre PRI y PAN.

   Estaba previsto que el borrador llegara a las comisiones del Senado el pasado miércoles, pero a lo largo de estos días ha sido imposible debido a las diferencias entre las fuerzas políticas e incluso a problemas de forma en la convocatoria de las reuniones.

   Los sucesivos aplazamientos de la reunión de las comisiones senatoriales llevaron el pasado viernes a las fuerzas políticas de la cámara alta a cancelarla de forma indefinida para permitir que el diálogo continuara sin la presión del calendario.

   Según ha trascendido, en realidad las negociaciones han estado protagonizadas por el PRI y por el PAN y se han centrado en cómo articular la participación privada en los hidrocarburos mexicanos. El partido gobernante proponía la fórmula de las licencias y el opositor la de las concesiones.

   "El diferendo entre PRI y PAN en torno a la reforma energética es solamente por cómo se reparten el botín petrolero", advirtió el senador del PRD Alejandro Encinas, en declaraciones recogidas por el diario mexicano 'La Jornada'.

EL ACUERDO

   Finalmente, el acuerdo se ha resuelto con varias modalidades de contratación con las empresas públicas de hidrocarburos, entre los que el sector privado podrá optar dependiendo del tipo de actividad que vaya a llevar a cabo.

   Así, "podrán ser de servicios, de beneficios o producción compartidos, o de licencia, para llevar a cabo, por cuenta de la Nación, las actividades de exploración y extracción del petróleo y de los hidrocarburos sólidos, líquidos o gaseosos"

   Otro de los escollos de la negociación han sido las formas de remuneración que serán "en efectivo, para los contratos de servicios; con un porcentaje sobre el beneficio, para los contratos de beneficio compartido; con un porcentaje sobre la producción, para los contratos de producción compartida; con la transmisión onerosa de los hidrocarburos una vez hayan sido extraídos del subsuelo, para los contratos de licencia; o cualquier combinación de las anteriores".

   "El Estado mexicano escogerá la modalidad de contraprestación atendiendo siempre a maximizar los ingresos para lograr el mayor beneficio para el desarrollo de largo plazo", reza el borrador, difundido a través de la página web del Senado.

   En cuanto a la adjudicación, "los contratos serán otorgados a través de mecanismos que garanticen la máxima transparencia, por lo que se preverá que las bases y reglas de los procedimientos que se instauren al efecto sean debidamente difundidas y públicamente consultables".