Normalistas de Ayotzinapa
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   CIUDAD DE MÉXICO, 20 Jun. (Notimérica) -

   El recuerdo de la desaparición forzosa de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa en el estado mexicano de Guerrero en 2014 fue el principal argumento de ataque de la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, en el marco de la 47ª Asamblea General de los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se celebra en Cancún desde este lunes.

   Con el objetivo de abordar la grave situación de crisis socio-política en la que se encuentra Venezuela, los miembros de la OEA retomaron la reunión cancelada el pasado 31 de mayo para llegar a un consenso entre los dos bloques: por un lado, el que incita al país presidido por Nicolás Maduro a iniciar un nuevo proceso de diálogo e insta a eliminar la Asamblea Constituyente.

   Por otro lado, el bloque de países de la Comunidad del Caribe (CARICOM), también pide el cese inmediato de la violencia pero, a diferencia que los anteriores, no está entre las consignas de estos 14 aliados tradicionales chavistas la solicitud de dicho cese, así como la liberación de los presos políticos.

   Rodríguez considera que los países que buscan soluciones "intervencionistas" en Venezuela --entre los que se encuentran Perú, Canadá, Estados Unidos y Canadá-- liderados por México, primeramente deberían tener en cuenta lo que ocurre en sus respectivas naciones, por lo que arremetió con uno de los asuntos sin resolver esenciales en dicho país centroamericano: la desaparición forzosa de los 43 estudiantes normalistas en la ciudad mexicana de Iguala.

   Este caso fue incluido en la lista de 10 proyectos que presentó la canciller venezolana frente a sus homólogos de la OEA, con la intención de condenar la responsabilidad del Estado mexicano en lo que se refiere a las desapariciones forzosas.

   Por ese motivo, la intervención de la ministra de Relaciones Exteriores de Venezuela fue aplaudida y agradecida por los familiares de las víctimas, que se manifestaron a las afueras del lugar donde se realizó la reunión de la OEA en el Hotel Moon Palace.

   Sin embargo, la concentración fue impedida y reprimida por miembros de la Policía Federal, según aseguraron los miembros de la organización de los Derechos Humanos de Guerrero 'Tlachinollan', que ha emitido un comunicado en el que se asegura que los asistentes "fueron hostigados cuando intentaban llegar a la sede con el fin de continuar su exigencia de justicia y verdad ante el órgano supremo de la OEA".

   De acuerdo con este comunicado, "en los hechos estuvieron involucrados al rededor de 100 efectivos policiales, quienes formaron una valla y golpearon a los familiares para impedir su acceso. A pesar de la lluvia las madres y padres increparon a los agentes por las agresiones en su contra. Dada la negativa y comentarios que les pedían que se retiraran, decidieron no seguir intentando la entrada al lugar en donde se desarrolla la Asamblea, por el temor a otro posible ataque".

   Además, el escrito oficial se refiere a la contrariedad del lema de la Asamblea 'Fortaleciendo el diálogo y la concentración para la prosperidad', advirtiendo que "el Gobierno de México evidencia nuevamente que lejos de buscar fortalecer el diálogo y el acceso a la justicia para las víctimas, no les da ese trato y mucho menos garantiza su acceso a la verdad".