BUENOS AIRES, 15 Sep. (Notimérica) -
El juez de la Corte Suprema de Argentina, Carlos Fayt, ha presentado su dimisión a tal cargo después de que desde el Gobierno se le acusara de no estar en plenas condiciones mentales para seguir en el cargo.
"Fayt, a sus 97 años, continuará trabajando hasta el 11 de diciembre, fecha en la que se hará efectiva su renuncia", anunció el Centro de Información Judicial (CIJ) en un comunicado.
Sus compañeros en la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda le han "reconocido su trayectoria" y según informó el propio CIJ, se realizará un acto de homenaje a Fayt antes de su retirada.
UNA OFENSIVA 'KIRCHNERISTA' POR EL DOMINIO DE LA CORTE.
Tras la renuncia de Fayt, el gobierno que resulte elegido en los próximos comicios tendrá la opción de elegir a dos nuevos miembros, con lo que tendría bastante poder en dicha institución.
Muchos son los que acusaban a Fayt de tener problemas mentales, llegando a asegurar que el juez, a sus 97 años, no reconocía a sus colaboradores, ni sabía en qué día vivía.
En su defensa salieron miembros de la oposición al 'kirchnerismo', como fue el caso de la diputada Elisa Carrió: "La verdad es que este ataque inverosímil, cruel, es un acto de tortura, porque la tortura puede ser física o moral".
En el propio entorno familiar de Fayt también salieron en su defensa. Su propia hija aseguró a Radio Vorteix que su padre "está lúcido y está ejerciendo sus funciones. Y merece todo el respeto de un ministro que ha sido un paradigma de decencia".
Su abogado dijo haber hablado telefónicamente con él: "Me dijo que hay una campaña en su contra, pero que va a aguantar los embates y resistir en el cargo".
No obstante, el juez ha acusado la presión y ante la cercanía de las elecciones el 25 de octubre de este año, ha considerado que había llegado la hora de su renuncia.