Actualizado 18/03/2016 09:43

Nicaragua dice a Colombia que las sentencias de la CIJ "tienen que respetarse"

Nicaragua dice a Colombia que las sentencias de la CIJ "tienen que respetarse"
REUTERS

BOGOTÁ, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

   El embajador nicaragüense ante La Haya, Carlos Argüello, ha dicho que las sentencias de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) "tienen que respetarse", después de que el organismo se haya declarado competente para resolver dos casos que enfrentan a Colombia y Nicaragua en La Haya por los espacios en disputa en el mar Caribe y la plataforma continental.

   "Esto manda un mensaje muy claro, que las sentencias de la Corte tienen que respetarse y punto", ha señalado el funcionario nicaragüense, en unas declaraciones que publica el periódico local 'El Nuevo Diario'.

   "En realidad es una victoria total para Nicaragua. Nosotros estamos aquí muy contentos con todo el trabajo que ha hecho el equipo. Todo ha salido muy bien", ha apostillado.

   Argüello ha indicado que espera que la decisión de la CIJ "haga comprender a los colombianos que cuando la Corte falla algo, es para cumplir". Asimismo, ha explicado que "ahora la Corte va a entrar a conocer el fondo del asunto" y añade que, para ello, "hay un procedimiento que hay que presentar alegatos escritos, después van a venir alegatos orales".

   "Si el proceso sigue su curso normal, se tomaría un par de años fácilmente. Pero ahora es muy temprano para poder anticipar plazos y todo eso, porque lo primero que tiene que suceder es que la Corte tiene que citar a los agentes para fijar el procedimiento. Así que hasta que eso suceda no podemos tener una idea exacta de tiempos", ha sentenciado.

   El alto tribunal ha declarado este jueves "admisible" la petición de Nicaragua para "determinar el curso preciso de la frontera marítima (con Colombia) en las áreas de la plataforma continental" que sobrepasan el territorio delimitado por el fallo del 19 de noviembre de 2012.

LA DISPUTA TERRITORIAL

   Uno de los asuntos se remonta al 16 de septiembre de 2013, cuando Nicaragua acudió a la CIJ para extender su plataforma continental más allá de las 200 millas náuticas, algo que Colombia considera "desmedido" y achaca a los "ánimos expansionistas" de su vecino.

   Poco después, el 26 de noviembre de 2013 Managua denunció a Bogotá por violar su obligación de no usar o no amenazar con el uso de la fuerza, así como de no violar las zonas marítimas nicaragüenses delimitadas anteriormente por la CIJ.

   La batalla judicial comenzó mucho antes, el 19 de noviembre de 2012, cuando la CIJ reconoció la soberanía colombiana sobre el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina pero amplió la extensión de las aguas territoriales de Nicaragua hasta las 200 millas náuticas.

   El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, consideró que este fallo era "inaplicable" sin un tratado internacional, al que Nicaragua ha accedido pero aún no ha comenzado a negociarse, y denunció el Pacto de Bogotá, por el que el país reconoce la jurisdicción de la CIJ.