SANTIAGO, 3 Ene. (Notimérica) -
Tres días después de la renuncia de Helia Molina como ministra de salud chilena, la preocupación de la Nueva Mayoría se centra en quien ocupará a partir de ahora el puesto, y además de si cumplirá con lo propuesto en el programa de salud.
Después de que la ministra de salud, Helia Molina, renunciase el pasado martes a su cargo tras unas polémicas declaraciones sobre el aborto, dentro del bloque del gobierno han surgido aprensiones con respecto al compromiso que pudiera tener el futuro sucesor de Molina en cuanto a la intención del gobierno de Bachelet a despenalizar el aborto con fines terapeúticos, por inviabilidad fetal y en casos de violación.
Esta preocupación llega después de que el subsecretario Jaime Burrowns, uno de las principales apuestas para este cargo, se mostrase contrario a la interrupción del embarazo, tal y como informa el diario chileno 'La Tercera'.
El diputado de DC y miembro de la comisión de Salud, Víctor Torres, aseguró que "llegue quien llegue, sea del partido que sea, ese ministro tendrá que ponerse al servicio de lo que la Presidenta ha dicho".
"Lo del cupo es secundario, yo quiero una persona en condiciones de llevar a cabo el programa" dijo el senador PPD Lagos Weber.
Molina, en una entrevista a un diario vespertino, había criticado la posición adoptada por la Iglesia Católica y algunos sectores conservadores sobre el rechazo del aborto en Chile, unas declaraciones que no fueron compartidas por el Gobierno de Michelle Bachelet.
La salida de la ministra se ha producido en momentos en que la mandataria y el Gobierno atraviesan su nivel más bajo de apoyo, lo que ha elevado las expectativas entre el oficialismo y la oposición en torno a un posible primer ajuste ministerial de cara al 2015.
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