MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El ex agente de Inteligencia Edward Snowden ha acusado al Gobierno de Barack Obama de "usar la ciudadanía estadounidense como un arma" por promover su captura internacional como represalia por revelar la existencia de un programa gubernamental para espiar a través de los servidores de las grandes empresas de Internet.

    "El presidente Obama dijo el pasado martes ante el mundo que no permitiría ningún tejemaneje diplomático sobre mi caso, pero ahora sabemos que ordenó a su vicepresidente que presionara a los líderes de los países a los que he pedido protección para que rechazaran mi solicitud de asilo político", ha dicho en un comunicado difundido por Wikileaks.

   A ello ha añadido que el Gobierno estadounidense ha revocado unilateralmente su pasaporte, sin que medie orden judicial. "La administración Obama me ha convertido en una persona sin Estado", ha denunciado.

   A este respecto, ha lamentado que, "a pesar de que durante décadas Estados Unidos ha sido uno de los principales defensores del derecho al asilo político --reconocido en el artículo 14 de la Declaración Universal de Derechos Humanos--, ahora es rechazado por el actual Gobierno".

   Snowden ha sostenido que "este tipo de engaño de un líder mundial" y "la pena extralegal del exilio", no son actos de "justicia", sino "viejas y malas herramientas de agresión política cuyo propósito es asustar, no a mí, sino a los que están detrás de mí".

   "Al final, la administración Obama no teme a los chivatos como yo, Bradley Manning o Thomas Drake. Nosotros somos personas sin Estado, en la cárcel, sin poder. La administración Obama os teme a vosotros. Teme una sociedad informada y enfadada que exija el Gobierno constitucional que se le prometió", ha considerado.

   Por último, el ex espía ha dado las gracias a su familia y sus "viejos y nuevos amigos" por garantizar su libertad. "Sigo firme en mis convicciones e impresionado por los esfuerzos de tantos", ha concluido.

CASO SNOWDEN

   Snowden se convirtió en un personaje público el pasado 7 de junio, cuando reveló a 'The Washington Post' y 'The Guardian' que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA) posee un programa llamado PRISM con el que accede a los servidores de nueve empresas de Internet, con su consentimiento, para recabar información útil para Inteligencia.

   Cuando la noticia se publicó, el ex agente de Inteligencia estaba en Hong Kong, pero una semana después decidió abandonar la ex colonia británica rumbo a Moscú. Desde entonces, se encuentra en el Aeropuerto Internacional de Sheremetyevo.

   Snowden pretende asilarse en algún país, al parecer de América Latina, aunque también se ha rumoreado sobre Rusia e Islandia, al considerar que no tendrá un juicio justo en Estados Unidos, que ya le ha acusado de espionaje, robo y conversión de propiedades del Gobierno.

   El Gobierno de Ecuador ha confirmado que Snowden ha presentado una solicitud de asilo político y ha advertido de que su resolución podría llevar hasta dos meses. Por su parte, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha subrayado que, de pedírselo, "casi seguro" se lo daría.

   Estados Unidos ha presentado una queja formal ante China por permitir que Snowden abandonara Hong Kong, pero el gigante asiático se ha escudado en el principio de 'un país, dos sistemas' y ha subrayado que "no había base legal" para impedir que el ex espía viajara a Rusia.

   Tras el fallido intento de retener a Snowden en Hong Kong, Estados Unidos ha expresado su deseo de evitar una confrontación con Rusia por este caso, pero ha insistido en que tiene la capacidad legal de expulsarlo y extraditarlo.

   Sin embargo, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha defendido la estancia del ex agente de Inteligencia en Moscú, subrayando que se trata de un "pasajero en tránsito", aunque ha advertido de que, si quiere quedarse, debe cesar en su empeño de "perjudicar" a Estados Unidos.