Homenaje a la concejal Marielle Franco
REUTERS / RICARDO MORAES

   MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) 

   La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha condenado este jueves el asesinato de la concejal de Río de Janeiro Marielle Franco y su conductor durante la jornada del miércoles y ha reclamado la apertura de una investigación independiente para esclarecer lo ocurrido.

   Franco, de 38 años y estrella emergente del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), ha sido asesinadas a tiros junto al conductor del vehículo --Anderson Pedro Gomes-- en el que viajaba en la zona norte de Río de Janeiro. El suceso tuvo lugar el miércoles por la noche y los investigadores sospechan que tiene que ver con la labor política de la concejal.

   "Marielle era una defensora valiente de las víctimas de los abusos policiales y una defensora incansable de los derechos de las mujeres y los afrobrasileños", ha destacado Maria Laura Canineu, directora de HRW en el país.

   "Las autoridades brasileñas deben responder de forma decisiva identificando a los responsables del asesinato de Marielle y Anderson y llevándoles ante la justicia", ha recalcado.

   Así, Canineu ha manifestado que "el clima de casi total impunidad en Río de Janeiro debe terminar de una vez por todas", antes de indicar que Franco y Gomes "son las últimas víctimas de un sistema de seguridad que ha fracaso desde hace mucho a la hora de detener la violencia o garantizar justicia para las víctimas".

   El presidente de Brasil, Michel Temer, ha condenado este hecho "inaceptable, inadmisible, como todos los demás asesinatos que tienen lugar en Río de Janeiro", informa la Agencia Brasil. El presidente ha destacado la labor de la fallecida en favor de "la paz y la tranquilidad" en la ciudad y ha reiterado el compromiso de su Gobierno para terminar con la criminalidad "desenfrenada".

   "Es demasiado pronto para decirlo, pero obviamente vemos este asesinato como una respuesta a su trabajo político, que es la principal teoría", ha explicado un fiscal citado por la agencia de noticias Reuters. Franco, de hecho, habían denunciado el domingo la intervención del Ejército para reforzar la seguridad en Río de Janeiro.

   Se han organizado vigilias y manifestaciones en al menos siete de las principales ciudades de Brasil y unos 150 miembros del PSOL han llevado flores y otras muestras de respeto a la sede del Parlamento para reclamar justicia por el crimen. La ONU y Amnistía Internacional han instado a las autoridades a llevar a cabo una investigación rápida y transparente.