CIUDAD DE MÉXICO, 18 Ago. (Notimérica) -
El incidente ocurrido en la madrugada del lunes en Puerto Vallarta, Jalisco, donde seis personas fueron secuestradas y entre ellas el hijo de 'El Chapo', Jesús Alfredo Guzmán, cambia el panorama del narcotráfico en México.
Las autoridades mexicanas han responsabilizado del secuestro al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), lo cual exhibe un crecimiento de poder de la organización en el país. Además, el CJNG es el principal enemigo del Cártel de Sinaloa, el cual lideraba 'El Chapo', ahora a la cabeza de Ismael Zambada García, conocido como 'El Mayo' y que muestra una eventual debilidad, ya que los analistas han señalado que "no es un líder tan agresivo", tal y como recoge el portal 'BBC Mundo'
Este debilitamiento se debe al nuevo encarcelamiento de 'El Chapo', según el exdirector del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), Guillermo Valdés Castellanos. A pesar de que 'El Chapo' mantuvo el control del Cártel de Sinaloa, conocido también como organización del Pacífico, cuando estaba en la cárcel de máxima seguridad de El Altiplano, de la cual escapó, con su nueva captura y cambio a la prisión de Ciudad Juárez, "no le ha sido posible mantener el control de la organización", en palabras del especialista.
El secuestro de Alfredo Guzmán es una evidencia de la guerra que existe entre ambos grupos por el control del tráfico de la droga en México, lo que ha supuesto un repunte de violencia en ciudades donde la ruta del narcotráfico es más importante, como Tijuana, Ciudad Juárez y Colima, zonas controladas por el Cártel de Sinaloa y que el CJNG quiere dominar.
Anteriormente, la organización de Sinaloa obtuvo su control después de derrotar los cárteles de Juárez y de los hermanos Arellano Félix, pero ahora existe una nueva batalla por controlar la zona sumada a varios ataques a personas cercanas a 'El Chapo'.
Desde que fue recapturado el patriarca de la familia y líder de la organización, casi todos sus allegados han sufrido asaltos y ataques a causa de sus actuaciones criminales. A mediados de junio, un grupo armado saqueó la casa de su madre en la comunidad de La Tuna, en Badiraguato; después mataron a dos sobrinos de su actual esposa, Emma Coronel y finalmente secuestraron a su hijo Alfredo Guzmán.
Estos hechos se deben a que muchas organizaciones pretenden arrebatarle su territorio mientras el se encuentra aislado en la cárcel de Ciudad Juárez y desde donde "le han impedido tener el contacto fluido para dirigir el grupo".
Tras el secuestro del hijo de 'El Chapo', el escenario presenta dos opciones: o que Alfredo Guzmán no sobreviva al secuestro o que el CJNG lo entregue a cambio de controlar alguna de las rutas del grupo de Sinaloa.
Según Valdés Castellanos, "el historial de 'El Chapo' habla de un proceso de venganza severo, no inmediato pero si habría consecuencias y sería un conflicto violento y muy fuerte".
NUEVA SITUACIÓN, NUEVOS TERRITORIOS
Aunque la imagen del CJNG se fortaleció a causa del debilitamiento de Sinaloa, aún no se puede determinar si superó en influencia a la organización de 'El Chapo' ya que durante muchos años ha sido considerada como la activa de México y una de las más poderosas de América Latina.
El mapa de los cárteles mexicanos está cambiando debido a la desmembración de las organizaciones en unidades menores, motivada por detenciones como la de 'El Chapo', líder del cártel de Sinaloa, 'La Tuta', líder de los Caballeros Templarios, 'El Viceroy', cabecilla del cártel de Juárez , Miguel y Omar Trevillo, líderes de Los Zetas y de los capos Ignacio Coronel , 'Nacho' y Arturo Beltrán, 'El Barbas'.
La caída de líderes ha creado cárteles que no tienen una cabeza principal que los dirija, lo que ha provocado la división de la organización y por lo tanto ha atomizado la lucha contra el crimen organizado, a razón de que hay líderes menos visibles.
Es así que en zonas como Tabasco y Veracruz, zonas controladas siempre por la banda de Los Zetas y en la cual tuvo el control durante más de una década, está siendo controlada por otros grupos. Lo mismo ocurre en Guanajuato y Michoacán, controladas hasta 2014 por el cartel de Los Caballeros Templarios, ya desarticulado.
En el caso de Jalisco, principalmente el municipio de Zapopan, es desde los años 80 la residencia familiar de los jefes del Cartel de Sinaloa. Allí viven la primera esposa de 'El Chapo', Alejandrina Salazar, así como la madre de la narcotraficante Sandra Ávila Beltrán, conocida como 'La Reina del Pacífico'. Ahora, Zapopan está controlada por el CJNG.
A pesar de este nuevo mapa de control del poder en México por parte de los cárteles, la organización de Sinaloa sigue siendo la principal proveedora de heroína, marihuana y drogas sintéticas al mercado estadounidense y sus ganancias son todavía mayores en el escenario del narcotráfico mexicano aunque su líder este en prisión.