LIMA, 16 Oct. (Notimérica) -
Llegado el día de su libertad, los futuros pasos de Martha Huatay Ruiz fuera de la cárcel Ancón II son un gran interrogante. Si bien conocemos todo sobre el pasado de la terrorista de Sendero Luminoso, qué hará con su libertad es un misterio.
Considerada como la heredera del liderazgo de Abimael Guzmán, cabeza principal del grupo maoísta Sendero Luminoso, Huatay podría mantener a día de hoy sus ideales y considerar adecuada su manera de actuar en el pasado, pues según apunta personal del penal cercano a ella durante todos estos años Huatay no ha mostrado ningún signo de arrepentimiento.
La rabia, y también el miedo, es palpable en la sociedad peruana a pesar de la edad con la Huatay recupera su libertad, que asciende a 74 años. De hecho, las autoridades han asegurado que la mantendrán vigilada a pesar de haber cumplido su pena de cárcel. Pero, ¿quién es Martha Huatay y por qué se le teme?
Conocida en la organización terrorista bajo el pseudónimo de 'Rosa', esta abogada y profesora de Filosofía y Ciencias Sociales nacida en la ciudad de Trujillo formaba parte de la célula terrorista 'Socorro Popular', encargada de la defensa legal de los senderistas detenidos y de la organización de protestas y atentados durante los años 80 y 90 en territorio peruano.
Asimismo, fue fundadora de la Asociación de Abogados Democráticos, organismo también afecto a Sendero Luminoso, visitando como abogada varios países europeos para explicar la situación que atravesaba su país, pasando después a la clandestinidad y formando parte del grupo más allegado al líder senderista, informaba 'El País' tras su detención en 1992.
Durante los años en los que formó parte de Sendero Luminoso, Huatay se encargó, entre otras cuestiones, de organizar y planificar varios atentados terroristas en la capital peruana, Lima, entre ellos uno de los casos más trascendentales de la secta: el caso Tarata. Fue precisamente este caso el que le llevó a ingresar en prisión en 1992 acusada de un delito de terrorismo y con una pena de 25 años de cárcel.
CASO TARATA
La noche del 16 de julio de 1992 la calle Tarata, en el distrito de Miraflores de la ciudad de Lima, sufrió uno de los peores atentados terroristas conocidos en la historia de Perú, dejando un saldo de 25 personas muertas, más de 200 heridos y cuantiosas pérdidas materiales y económicas.
El citado día, dos coches bomba, cada uno equipado con 250 kilogramos de explosivos --ANFO y dinamita--, explotaron en la mencionada calle a las 21.15 horas y, además de dejar más de una veintena de víctimas mortales casi en el acto, la onda expansiva creada provocó graves daños en 183 casas, 400 negocios y 63 automóviles estacionados
El verdadero objetivo del ataque era la agencia del Banco de Crédito de Perú, pero un vigilante de la entidad no permitió a los senderistas que llevaban los coches estacionar en el lugar, por lo que decidieron dejar los vehículos en la siguiente intersección, en la calle Tarata.
Tras los hechos, el 12 de septiembre de 1992 fue capturado Óscar Ramírez Durand --alias Camarada Feliciano--, otro de los líderes de Sendero Luminoso, quien en sus declaraciones sobre el grupo terrorista y su operativo nombró a Martha Huatay como participante en el caso, aunque esta declaración no fue entregada y, por ello, Huatay no fue investigada por ello.
El 20 de octubre de 1992, poco después de un mes de la detención de Guzmán, la brigada antiterrorista de Perú confirmaba haber atrapado a Huatay y otros siete integrantes de Sendero Luminoso, siendo finalmente encarcelada con una pena de 25 años de prisión y el pago de una reparación civil solidaria en favor del Estado, la cual no ha abonado.