MADRID, 26 Dic. (Notimérica) -
La productividad es una de las variables más importantes de la empresa y uno de los mejores mecanismos para analizar el progreso de los países, aunque también ha sido uno de los mayores problemas a los que se ha enfrentado América Latina desde la década de los ochenta. Por eso, el reto de la región es la productividad y aquí te damos las claves para superarlo.
La explicación más frecuente de la desaceleración de la productividad se debe a la existencia de "fallas de mercado y distorsiones de política", como ha explicado la Universidad Nacional Autónoma de México, en su informe 'La productividad y el desarrollo en América Latina'. Aunque en la región, se ha sumado también el problema de la crisis de la deuda en la década de los ochenta, cuando la deuda externa excede la capacidad de los países para pagarla.
A partir de 1990, siete países se han expandido "a una tasa per cápita por encima del promedio mundial (Chile, República Dominicana, Panamá, Perú, Argentina, Uruguay y Costa Rica), seis de los cuales han crecido más que en el período anterior a la crisis de la deuda [todos los anteriores menos Costa Rica]", según destaca un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe sobre las variaciones de productividad en países latinoamericanos.
Sin embargo, el crecimiento económico en la región -según datos entre 1980 y 2009- ha sido relativamente bajo, lo que se explica por "la contabilidad del crecimiento a nivel industrial", ya que en casi todos los países los servicios han sido el sector que ha crecido más rápido, como por ejemplo en Brasil, donde creció más rápido "el transporte y las comunicaciones", en parte debido a la "incorporación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación en el proceso productivo". Los siguientes sectores, después del servicios, fueron "el primario, agropecuario y minería", según detalla el informe de CEPAL.
CÓMO AUMENTAR LA PRODUCTIVIDAD
La productividad es la relación "entre lo que produce una empresa y los recursos utilizados para dicha producción", según explica CEPAL, aunque también incluye otros factores como "la cantidad y calidad de su producción" o "la actividad innovadora". Para el vicepresidente del Banco Mundial (BM) para América Latina y el Caribe, Hasan Tuluy, "en el caso de muchos países latinoamericanos, el sector servicios agrega valor y emplea trabajadores altamente calificados".
Por eso, Tuluy explicó el año pasado que "con miras a un rápido crecimiento", América Latina debería "hacer un uso inteligente del capital extranjero", en lugar de "su escasa capacidad de ahorro", así como "mejorar la calidad de la inversión". Por eso, para el vicepresidente del BM no se debe tratar de mejorar la competitividad con una "mano de obra barata y tipos de cambios devaluados", sino que debe aprovecharse el que los países latinoamericanos son ricos en materias primas, para lograr "el crecimiento en torno a la demanda interna".
El último informe de proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) de este octubre, el estancamiento de las exportaciones de materias primas y la incertidumbre en la política interna de algunos países han hecho que América Latina crezca este año un 1,3 por ciento, la menor tasa de expansión de la región desde 2009, aunque el FMI ha incrementado su previsión a un 2,2 por ciento para 2015.
Como destacó el secretario general de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), Giorgio Trettenero, con motivo de la 48 Asamblea Anual de la Felaban este noviembre, "aumentar la productividad es el gran trabajo que tenemos ahora".
Para Trettenero, el aumento de la productividad puede lograrse continuando "proyectos rentables", adoptando "reglas del juego claras para que los inversionistas vengan", así como a través del fortalecimiento de la educación, la diversificación de la estructura productiva y exportadora o la "construcción de obras de infraestructura como carreteras y puertos".
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