MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS/Notimérica) -
El responsable de la unidad de Cooperación Judicial Internacional y Extradiciones de la Fiscalía de Perú, Alonso Peña Cabrera, ha anunciado este jueves que la información sobre el 'caso Odebrecht' que reciba de Brasil sólo podrá compartirse con fiscales y jueces, comprometiéndose así con la confidencialidad que solicitó en la víspera la Fiscalía brasileña.
En declaraciones al programa 'La Hora N', del peruano Canal N, Peña ha señalado que él mismo será el enlace para acceder a los testimonios de los empresarios de la constructora brasileña Odebrecht.
La Fiscalía de Brasil decidió el miércoles levantar la confidencialidad sobre los documentos relacionados con la multimillonaria trama de corrupción que implica a la constructora, por lo que estos podrán ser compartidos con otros países.
El fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, explicó en rueda de prensa que su homólogo brasileño, Rodrigo Janot, había suspendido la confidencialidad de las declaraciones y documentos vinculados al 'caso Odebrecht' con otros países que formen parte de la investigación, si bien la transmisión de estos debe hacerse también bajo confidencialidad, para evitar "perjuicios" en las pesquisas.
Colombia solicitó a Brasil a principios de mayo que compartiera las pruebas del caso.
Odebrecht y su filial petroquímica, Braskem, llegaron el pasado diciembre a un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos por el cual admiten el pago de sobornos a funcionarios de 12 países para conseguir contratos públicos. Ambas compañías se han comprometido a pagar conjuntamente una multa de 3.500 millones de dólares a cambio de que se retiren los cargos en Estados Unidos, Suiza y Brasil.
Este acuerdo se enmarca en las investigaciones estadounidenses por el caso 'Lava Jato', en el que las autoridades brasileñas indagan en una red de pago y cobro de sobornos a políticos de distinto signo para lograr contratos de la petrolera estatal, Petrobras.
Odebrecht ha reconocido el pagó más de 2.000 millones de dólares en sobornos a funcionarios y políticos brasileños y otros 439 millones de dólares en otros países de la región.