CIUDAD DE MÉXICO, 19 Feb. (Notimérica) - Durante más de una década, la principal estrategia de los Gobiernos mexicanos en su lucha contra el tráfico de drogas ha sido la de capturar y detener a los grandes líderes de los cárteles. Sin embargo, los especialistas asegura que con técnica de concentrar las operaciones en la detención de los principales narcos provoca divisiones y guerras internas en las organizaciones. Además, causan disputas por los territorios o mercados de droga, e indirectamente fomenta el incremento de otros delitos, como el robo de combustible, extorsión y tráfico de personas.